Ferrari se reunió con un abogado y un exinterno que coordinan un exitoso taller literario en la U. 23
La Plata, 08/09/16. El ministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires, Gustavo Ferrari, mantuvo un encuentro ayer con el Dr. Alberto Sarlo y el ex interno Carlos Mena, quien estuvo preso por más de 8 años y volvió a la cárcel para sumarse a un proyecto educativo liderado por Sarlo en un penal de Varela.
Ferrari se interiorizó sobre el taller de capacitación en el área de Lengua y Literatura a cargo del abogado y escritor Alberto Sarlo, quien, por iniciativa propia y ad honorem, enseña y realiza prácticas de lectura, comprensión de texto y escritura con los internos del pabellón 4 del sector de máxima seguridad de la Unidad 23 Florencio Varela.
Sarlo coordina este taller desde mayo del 2010 y ahora se le ha sumado Carlos Mena, un exinterno que vuelve a la cárcel para dictar el Taller de Literatura a sus excompañeros. Mena comentó que gracias a este taller aprendió a leer y a escribir, prometió que iba a volver para ayudar y hoy a un mes y medio de haber finalizado la condena y recuperado su libertad, está cumpliendo su promesa.
El ministro les expresó su apoyo a este trabajo, convencido de que, para que la cárcel deje de ser un intervalo entre delito y delito, el Servicio Penitenciario debe garantizar la reinserción social de los internos a través del trabajo, la educación y el deporte.
Este taller se lleva a cabo los miércoles, y el pabellón donde se realiza posee una biblioteca, a la cual todos los integrantes de esa sección pueden acceder sin restricciones.
El Dr. Sarlo contó que este proyecto surgió con la idea de generar una editorial cartonera dentro de la cárcel. Propuso que los gastos corran por su cuenta y con la excusa de enseñarles literatura y que los internos lean, puedan hacer ellos mismos sus propios libros cartoneros, como en su caso que editó su primera novela en una editorial de este estilo.
Estos internos escritores ya imprimieron dos libros de cuentos infantiles ilustrados por uno de los participantes, cuyos ejemplares fueron donados a jardines de infantes y comedores del Conurbano Bonaerense.
Prensa Justicia/FW
