Capacitación sobre Seguridad Alimentaria en las cárceles

Lisandro Olmos, 30/03/11 En un acto realizado ayer en la Unidad 1 Olmos se llevó a cabo la presentación de un nuevo proyecto, desarrollado por la Secretaría de Extensión de la Universidad Nacional de La Plata, que contempla el dictado de cursos de capacitación sobre Seguridad Alimentaria destinado a los internos de los penales bonaerenses.

 

 

El evento fue presidido por el Jefe del Servicio Penitenciario Bonaerense, Javier Mendoza, quien estuvo acompañado por el Director de Seguridad e Higiene Alimentaria, Roberto Vidal, el Jefe de Complejo Penitenciario Olmos, Marcelo Rodríguez y el Director de la Unidad 1, Alejandro Ramírez. En tanto que en representación de la Universidad, se hicieron presentes el Decano de la Facultad de Ciencias Veterinarias, Eduardo Pons, el Vicedecano, Daniel Arias y el Secretario de Extensión, Guillermo Broglia.

 

Además, estuvieron el Director y Subdirector General de Recursos Humanos, Héctor Eyros y Marcelo Capra, en ese orden, el Subdirector General de Educación, Walter Vélaz, y el de Trabajo, Aníbal Ruiz, entre otras autoridades y personal penitenciario, docentes e internos.

 

La propuesta será llevada a cabo por profesionales de la Facultad de Ciencias Veterinarias, Ciencias Exactas, Humanidades, el Colegio Nacional en coparticipación con la Dirección de Seguridad e Higiene Alimentaria del Servicio Penitenciario, como así también el Patronato de Liberados y el Programa de Autovalimiento Juvenil La Plata (PROA).

 

En el acto, Daniel, uno de los internos inscriptos, brindó palabras de agradecimiento a las autoridades penitenciarias y universitarias por “la confianza para poder proyectar un futuro mejor, a través de un programa laboral que nos abre las puertas a la libertad”, expresó Daniel, alojado en el Pabellón de Jóvenes Adultos de la Unidad 1.

 

En la apertura de la capacitación, Mendoza señaló que “estos son los actos más lindos, donde se inaugura un espacio de educación, de formación laboral, que son los ejes que nos ha trazado en la gestión el gobernador (Scioli) y el ministro (Casal), donde nuestra tarea es trabajar para revalorar la vida de estos jóvenes que circunstancialmente se encuentran privados de su libertad, encausar su vida y que puedan volver dignamente a la sociedad”.

 

Luego, el Jefe del Servicio instó a los más de cincuenta internos presentes a que “se encuentren a sí mismos, sus valores, su significación; haciéndose visibles, considerándose importantes, van a ser importantes en la sociedad. Por eso, al aceptar este desafío tan grande de formarse en una cárcel, van a aprender a superarse a ustedes mismos”.

 

Este curso se dictará para internas de las Unidades 8 y 33 (Los Hornos) e internos de las Unidades 1 (Olmos), 18 (Gorina) y 9 (La Plata). Asimismo, se capacitará a los agentes penitenciarios encargados del área de cocina y comedores, en tanto que los ex internos a disposición del Patronato de Liberados y los jóvenes amparados en el PROA también serán incluidos en esta instrucción.

 

El objetivo principal del proyecto es promover la educación mediante la producción y manipulación segura de alimentos de personas privadas de su libertad, promoviendo la calidad de vida y la capacitación para un trabajo, pilar fundamental para la reinserción social al momento del egreso del sistema penitenciario.

 

La modalidad elegida para llevar adelante esta capacitación laboral es la de curso –taller, desarrollado en 6 encuentros, de tres horas cada uno, por el término de un mes y medio. Las actividades previstas están enmarcadas en la normativa existente sobre la capacitación primaria del personal involucrado en la manipulación de alimentos, materias primas, utensilios y equipos. Una vez finalizada y aprobada la capacitación, se facilitará la obtención de la Libreta Sanitaria como instrumento formal de reinserción laboral y social.

 

Cabe destacar que este tipo de aprendizajes no solo es considerado como una alternativa laboral posible para las personas privadas de su libertad, sino que además contribuye a la prevención de la transmisión de agentes infecciosos vehiculizados por alimentos, permitiendo una mejor calidad de vida intramuros y ayudando a mejorar las condiciones de preparación y servicio de alimentos preexistentes.

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