Casamientos en la Unidad 2

Sierra Chica, 21/11/12 La primavera trajo aire renovado y momentos emotivos en la Unidad Penitenciaria Nº2 de Sierra Chica, ya que en el lapso de una semana se realizaron dos uniones civiles en el  SUM de visitas de la cárcel.

Días pasados se realizó el casamiento entre Jorge Humberto G., interno de la unidad, y Patricia Soledad Martínez, vecina de la ciudad de Olavarría.

La relación comenzó hace ocho meses y se conocieron por medio de la radio.  “Ella es de Olavarría y después de tres días de hablar decidió venir a verme y ahora tomamos la decisión de casarnos. Los dos éramos solteros” comentó con mucha emoción el novio minutos antes de dar el “sí”. Mientras que la novia afirmó que “la familia me deseó lo mejor y toda la fuerza. Tenemos muchos proyectos, pero por ahora esperar que salga en libertad para concretarlos”.

La delegada del Registro Provincial de las Personal de Sierra Chica, Sandra Gómez Menguillo, fue la encargada de oficializar la ceremonia junto a su asistente, Lorena Álvarez. Oficiaron como testigos la hermana y una amiga de la novia, Estefanía y Sabina respectivamente. Luego de sellar la unión con un beso, los novios compartieron con los familiares e internos presentes un ágape.

La otra ceremonia de unión civil y casamiento por el rito de la iglesia evangélica de la “Cosecha Mundial” fue entre Natalia Bianchi y Guillermo F., también alojado en la U2. Los novios se hicieron presentes acompañados por sus familiares más cercanos, sus hijos Ludmila y Rodrigo y los testigos Sonia y Gerardo.

Álvarez también estuvo a cargo de la ceremonia leyéndoles a los contrayentes los deberes, derechos y obligaciones que tendrán de ahora en más. Luego el Ministro de la iglesia Evangélica, Ocaña Raúl, inició el casamiento por iglesia leyendo la Biblia y mencionado que “de ahora en adelante serán uno en carne y sentir”.

 “El casamiento es algo precioso para la vida del varón y la mujer, nos conocimos en el barrio, ella pasaba por el frente de mi casa, y hoy cumplimos el séptimo aniversario. La palabra de dios nos une y seremos una misma carne y sentir. Este es un privilegio que estuvimos esperando desde hace mucho tiempo” expresó con mucha emoción, Guillermo, el novio.

La ceremonia fue vivida con emoción por ellos y sus familiares quienes compartieron un ágape y recibieron los augurios de una vida en unión y libertad.