Detenidos de Sierra Chica expusieron sus trabajos en Tecnópolis
Sierra Chica, 31/10/11 Alumnos internos de la Escuela Primaria de Adultos Nº 701 "Madre Teresa de Calcuta" y de la Escuela de Educación Media Nº 5 "Rufino Sánchez" que funcionan en las Unidades 2, 27 y 38 de Sierra Chica presentaron sus proyectos escolares en la muestra Tecnópolis, organizada por la Unidad Bicentenario de la Presidencia de la Nación.
En un predio de 60 hectáreas sobre la avenida General Paz entre Constituyentes y Ricardo Balbín, la muestra está dividida en cinco continentes: Aire, Agua, Tierra, Fuego e Imaginación, donde se ven los desarrollos realizados por argentinos en cada área temática. Con la participación de todos los sectores de la sociedad, Tecnópolis está concebida como un espacio donde confluyen el trabajo, la capacidad, el esfuerzo y el talento.
Fueron dos los detenidos que pudieron llegar a Tecnópolis acompañados por directivos y docentes. Para Ariel, que se encuentra cursando dos materias de la carrera de Derecho y se encuentra próximo a salir en libertad, ésta fue su primer salida y destacó que "fue una experiencia bastante linda, poder salir, encontrarme con mi familia en un contexto productivo y que me vieran interesado en mejorar".
"Los organizadores nos invitaron a nivel nacional, nosotros habíamos participado a nivel provincial en la Feria de Ciencia y Tecnología con una mención especial. Y nos convocaron porque consideraron muy importante la trayectoria de la Escuela 701, los 17 años que hace que participamos en la Feria. Fuimos como invitados especiales, tuvimos un stand y durante todo el día mostramos nuestro proyecto a la gente que se acercaba para conocerlo. Fueron los evaluadores a verlo, también el Secretario General del Suteba, Roberto Baradel, que estuvo interesándose en el proyecto con gente del sindicato" comentó entusiasta Benjamín. Este interno lleva tres años y ocho meses detenido, cuando llegó a la cárcel sus estudios se limitaban a una primaria incompleta, hoy se encuentra tramitando el ingreso a Sociales y casi es abogado.
El proyecto de la Escuela 701 trata acerca de la búsqueda de una verdadera inserción social, a partir de las redes generadas entre organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, intentando terminar con la estigmatización del detenido. Los estudiantes concluyeron en que esta inclusión no es un problema atinente solo al privado de la libertad, sino que es congénita a una clase social, que tiene como final la cárcel, consecuencia y no causante de un progresivo deterioro humano. Por tanto corroboraron que el plexo jurídico legal es favorable y del cual no hay leyes a modificar, sino a cumplir.
Para Benjamín lo importante es “darle difusión al proyecto y esa fue una oportunidad muy importante para poder hacerlo. Sobre todo por la importancia del tema, por el trato que le han dado las redes sociales que trabajan en favor del detenido, por la posibilidad de que las escuelas en contextos de encierro tengan un tratamiento especial dentro de la Ley de Educación”.
Los alumnos contaron con la colaboración de dos asesores científicos, el antropólogo Horace González y el estudiante de Sociología Ariel Maier, la guía de la directora de la Escuela 701, Elisabet Bórmida, la colaboración de la diputada provincial Alicia Tabarés de González Hueso y personal del Servicio Penitenciario Bonaerense.
Por su parte, detenidos alojados en la Unidad 2 Sierra Chica presentaron un trabajo sobre promoción sanitaria y salud sexual, que armaron en la escuela secundaria y que luego difunden entre los internos. Alumnos y docentes fueron invitados por el Ministerio de Educación a presentar su trabajo en la Feria Nacional de Ciencia, Tecnología y Sociedad en Tecnópolis.
La directora de la EEM5, Elízabet Ubach, explicó que en Tecnópolis se exponía "el trabajo que los estudiantes realizaron sobre el cuidado del cuerpo, vinculado a la Ley de Educación Sexual Integral, sobre todo apuntando a la prevención del VIH". La directora resaltó que "los alumnos aprenden en la escuela sobre infectología y riesgos de contagio, y después, cuando cada uno vuelve a su pabellón, se transforma en un promotor sanitario entre sus compañeros"."La idea es que el derecho a la educación es universal y por eso no tiene que haber diferencias en las oportunidades", añadió.
Jorge, uno de los presos expositores, contó que "nuestro proyecto se llama `estudiantes + información = salud` y a través de los conocimientos que los docentes nos pasan ayudamos a nuestros compañeros en sus cuidados sanitarios". Además, señaló "Es la primera vez que salgo de la Unidad en siete años y me pone muy orgulloso hacerlo para representar al colegio en algo tan importante como esto, poder contarle a tanta gente lo que preparamos. Compartir el lugar con otros colegios es algo muy bueno".
Pablo, el otro alumno que expuso, dijo que "estudiar en la cárcel es complicado, pero después te das cuenta que es el único lugar donde encontrás algo de libertad, porque sos tratado como si estuviéramos afuera, y eso para nosotros es importantísimo". "Para mí esto es único porque en los seis años que llevó `privado`, ésta es la primera vez que subo a un camión penitenciario sin estar esposado en ningún momento y estoy en un lugar abierto con miles de personas y pude recorrer este grandioso predio, estoy más feliz que nunca", continuó.
Pablo admitió que "las palabras no alcanzan para describirles todo esto a mis compañeros; la experiencia, el lugar, son muchas cosas grandes juntas. De alguna manera y con el tiempo que tenemos se los voy a transmitir".
Los familiares de Pablo y Jorge se acercaron al puesto donde ellos exponían sobre salud sexual a distintos colegios secundarios y los acompañaron durante toda su estadía en Tecnópolis. Tanto los alumnos como los docentes trabajaron en conjunto con el personal y directivos del Servicio Penitenciario para hacer posible la inclusión de los alumnos en este tipo de actividades culturales.