Oficios técnicos para la población femenina de Bahía Blanca

Bahía Blanca, 29/04/19.- En pos de promover la igualdad de género, en la Unidad 4 de Bahía Blanca se comenzaron a dictar oficios técnicos para las mujeres que se encuentran alojadas en la mencionada dependencia.

 

Si bien la igualdad de oportunidades cuando hablamos de género, no siempre son el reflejo de un número o una estadística, debido al esfuerzo que implica derribar barreras culturales establecidas y enquistadas en todas las estructuras sociales, se mide también en la decisión de afrontar el desafío de incluir dos mujeres dentro de las diez vacantes propuestas para el comienzo del curso de capacitación en Soldadura por arco (SMAW) que se dicta dentro de los talleres de la Unidad, con la participación de empresas pertenecientes a la Unión Industrial de Bahía Blanca.

La capacitación, que históricamente se dictaba a hombres, en esta oportunidad se dictará también a dos internas incluidas dentro de un programa que apunta a una calificación de alto nivel profesional muy requerida al momento de ingresar al staff de cualquier empresa del rubro.

Para dejar de ser una teoría y poder plasmarse como una realidad, más aún dentro del mercado laboral actual, que exige una mayor capacitación y especialización técnica, se abre a las mujeres, desde la unidad penal, un abanico de oportunidades en capacitaciones técnicas, con muchas expectativas de lograr la inclusión sociolaboral de la mujer.

Desde el Departamento de Cultura Laboral Región Sur, a cargo de Javier González, dependiente de la Dirección General de Asistencia y Tratamiento y la Subdirección General de Trabajo Penitenciario, y bajo las premisas que permiten el desarrollo de proyectos locales que unen recursos e instituciones, se logró este acuerdo que favorece a la población carcelaria, sin distinción de género.

Rosana, una interna que participa del curso, expresó: “Sabemos que también podemos aprender oficios y hacerlo con responsabilidad, al igual que el resto. Sólo depende de la voluntad de cada persona, sin diferencias”.

En tanto, Javier González resaltó: “Es un gran desafío y un trabajo en equipo coordinado con la Jefatura de Unidad, Sección Talleres y todo el personal, ya que, dentro del establecimiento, sólo funciona un anexo femenino que no supera al 3% del total de los internos. Estructuralmente hablando, hay varios obstáculos que sortear. Superándolos con voluntad y espíritu de trabajo, darán muy pronto sus frutos”

Prensa CPZS/MTD



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