Cierre de año para los talleres tratamentales de la Unidad 13

Junín, 21/12/18.- Semanas atrás se desarrolló en la Unidad 13 de Junín una charla sobre alimentación de lactantes, niños y embarazadas que abordó también los distintos trastornos alimenticios y sus consecuencias. Con la conferencia, a cargo de la nutricionista Florencia Garbarini, se produjo el cierre de año de los talleres tratamentales que se realizan en el establecimiento penitenciario.

 

A lo largo de 2018 se han llevado adelante diversas actividades que comprenden a los internos como alumnos y pacientes en pos de una mejora en su calidad de vida mediante terapias alternativas que otorguen soluciones a sus conflictos personales y los doten de herramientas para desempeñarse en la sociedad una vez recuperada su libertad.

Entre los numerosos talleres tratamentales que se han impulsado a través del trabajo conjunto entre la Unidad 13 y el Municipio de Junín se encuentran el taller de reflexión “Interactuemos” a cargo del psicólogo, Luis Castría, el taller de reflexión “Valores”, dirigido por el Abogado, Juan González Bruzzese, el taller de lectura y narración “Colectivo Juana Azurduy”, dictado por Estela Centeno y Mariel Dionatelli, el taller de alfabetización “Crecer”, a cargo del interno Sergio, el taller literario dirigido por Silvia Biancardi, el taller de manualidades “Se recicla todo”, a cargo de la Artista Plástica, Marisol Fernandez, el taller reflexivo “Padres que acompañan”, llevado adelante por Patricia Chort,, el taller de yoga dictado por Max Pierro y el taller de biodanza de la profesora, María Cristina Aniceto, entre otros.

El Director de la Unidad 13, Víctor Martínez destaca los saberes y valores que nutren a los internos a través de los talleres en contexto de encierro que contribuyen a su educación y construcción de lazos sociales. “Es por ello que debemos asegurar sus herramientas de vida” concluyó Martínez.

Por su parte, el Subdirector de Asistencia y Tratamiento, Argentino Gerli explicó que “los talleres se llevaron adelante a lo largo de 2018. Se trabajó mucho con los internos quienes se entusiasmaron por perfeccionarse cada vez más sobre lo que iban aprendiendo.

Al referirse al taller que lleva adelante, Mariel Dionatelli explicó que “se busca a cada individuo, a través de la lectura puedan sentir su pertenencia a algo en particular. Se intenta conseguir una apertura del ser que implique que los internos cambien su forma de ver las cosas para alcanzar un crecimiento personal”.

Por otro lado, la tallerista Patricia Chort subrayó que “el trabajo manual y corporal posee como incentivo el desconectar a los internos de sus problemas diarios. A través de estas actividades, ellos descansan sus mentes”. Asimismo, Chort destacó que “las familias colaboran con el material para que trabajen lo que nos lleva a un contacto social más allá de los muros. Además, se realizan muchas cosas que luego se donan a niños carenciados y hospitales. Eso mantiene a las personas privadas de su libertad animadas, ya que se sienten útiles”.

 

SS/MG

 

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