Junto al equipo de Justicia Restaurativa, el periodista Mario Massaccesi eligió abrir su corazón en la Unidad 33 de Los Hornos

Los Hornos, 25/07/19.- Con el objetivo de compartir el Día del Amigo, el equipo de Justicia Restaurativa y el periodista Mario Massaccesi se acercaron hasta la Unidad 33 de Los Hornos para brindar una charla motivacional.

El sábado, en horas de la mañana, la visita, recibida por la directora de la Unidad 33, María de los Ángeles González Nuevo, y la subdirectora de Asistencia y Tratamiento, Rosa Miño, realizó una recorrida por el penal hasta encontrarse con las internas y sus hijos. Tras compartir unos mates en el pabellón de madres, el equipo de Justicia Restaurativa, encabezado por el Defensor Oficial, Andrés López, se dirigió hacia el sector Escuela para que el orador y periodista pudiera conversar con las mujeres privadas de libertad.

En vez de contestar mensajes de salutaciones por celular o redes sociales, Massaccesi eligió hacer algo distinto. Antes de su exposición, invitó a las mujeres a cumplir con cuatro consignas: “No crean nada de lo que voy a decirles, experiméntenlo. En segundo lugar, no quiero tener la razón de nada, porque cada una tiene su verdad, y está bien. Tercero, pidan ayuda antes de meter la gamba. Y el cuarto punto, es la confidencialidad. Tengamos respeto por nuestras historias”.

De esa manera, y luego de la introducción, Mario abrió su corazón y contó el espisodio más tremendo de su vida, y cómo hizo para sanar y convertirse en esa persona resiliente y generosa. Consultado sobre los motivos que lo llevaron a narrar una historia desconocida para los medios, inclusive, para su familia, respondió: “Decidí contar una historia íntima, personal, dolorosa, la más dolorosa de mi vida, porque quería venir sin juicios, no quería decirles lo que tienen que hacer, sino que elegí poner mi propio ejemplo de lo que hice a partir de lo que me pasó. La idea fue hablar en un mismo idioma, hablar desde el dolor, desde el error, desde el miedo y la fortaleza. Y a partir de ahí, empezar a construir. No quiero ser un profe Ciruela, no lo soy y tampoco me interesa, menos en un lugar que, como bien dijo una de las internas, hay tanta vulnerabilidad. Quise venir y contarles cómo fue mi vida, y a partir de allí, que fuera un diálogo democrático, parejo, en el que hubo diferencias, porque no pensamos igual, pero desde donde se pudo construir. Espero que este Día del Amigo haya valido la pena”.

Entre los integrantes del equipo de Justicia Restaurativa también estuvieron la directora del Hospital “Eva Perón” de San Martín, Amelia Franchi, la coordinadora del programa nacional de Salud en Contexto de Encierro, Natalia Sosa Loyola, la periodista y productora, Silvana Amato, la defensora ad-hoc del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil y fotógrafa, Romina Mateo, la licenciada en Enfermería, Mariela Rodríguez, y los jóvenes de Hillsong City Care, Florencia Ojea y Leandro Irala.

“Fue una charla muy amena en la que pudimos expresar lo que nos está pasando, lo que estamos viviendo. El hecho de hablar con otro, nos ayuda a sanar lo de adentro y nos da la esperanza de que hay gente apoyándonos y mostrándonos que no estamos solas. Después, cada una, tendrá que aportar su granito de arena para que nuestros hijos y nietos tengan una vida mejor que la que tuvimos nosotras”, dijo Marcela, una de las internas. 

Para distenderse un poco, los presentes compartieron un desayuno con chocolatada y medialunas. Mientras tanto, el defensor oficial, Andrés López, destacó la visita del reconocido periodista y aseveró: “Las mujeres son las más olvidadas del sistema, nadie se acuerda de ellas, que merecen una oportunidad, un abrazo, una esperanza o ser miradas como lo hizo Mario. Están enojadas, y es lógico. Hoy nuestro invitado vino a ofrecer su corazón. Fue muy fuerte lo que él contó y, seguramente, todos los que estuvimos acá ya no seremos las mismas personas”.

Antes del final, las privadas de libertad pusieron en palabras lo que la jornada les dejó. Perseverancia, felicidad, optimismo, compañerismo y alegría, fueron sólo algunos de los rótulos que escogieron para expresar sus sensaciones.

“Me encontré con mujeres que tienen ganas, que todavía no pueden o no saben, y que necesitan gente que les de una mano, no que vengan a preguntarles por qué, porque de eso se encarga la Justicia, sino que les pregunten para qué, qué quieren hacer a partir de ahora, qué pueden hacer aquí adentro y qué les está faltando para estar mejor. Y cuando hablamos de estar mejor, no hablo de un ‘Sheraton’, sino de generar las condiciones con el objetivo de que ellas encuentren recursos, dones, habilidades para que, cuando salgan, puedan hacerlo fuertes y no reincidir”, concluyó Massaccesi.

T: MTD

 

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