Internos de Romero concluyeron un taller de Lectura e Interpretación de Biblia
M. Romero, 26/03/18. Cerca de 40 internos jóvenes adultos finalizaron un taller de Lectura e Interpretación de Biblia. A cargo del párroco de la Unidad 45 de Melchor Romero, Nicolás Oyhamburu, los internos compartieron la cursada durante dos meses, tres veces por semana.
En una ceremonia cargada de espiritualidad, los privados de libertad obtuvieron su reconocimiento. Junto al Capellán General del Servicio Penitenciario Bonaerense, Eduardo Lorenzo, al director del Penal, Juan Carlos Troche, a los subdirectores, al personal penitenciario y al catequista Alberto Mattioli, Nicolás Oyhamburu entregó los certificados y agradeció la excelente predisposición de los privados de libertad.
Por su parte, Lorenzo, destacó la tarea del párroco de la Unidad 45 y expresó: “Como decía San Agustín, nadie puede conocer a Dios y no amarlo. Leer la Biblia es un modo de acercarnos a él, y así, lo vamos amando. La Biblia es como el manual de instrucciones para saber aterrizar el avión de la espiritualidad. La Biblia habla del amor al prójimo y nos enseña cómo amarlo. Nos habla de un samaritano, de un leproso, de empezar a querer a quienes no nos quieren, de comenzar a jugarse por los que nadie se jugaría, y de ser compañeros de ruta”.
Andrés y Brian, fueron dos de los alumnos que obtuvieron sus certificados junto a un breve catecismo y a una estampita. Andrés contó que leyeron la Biblia y que la fueron relacionando con cuestiones de la vida cotidiana. Además, dijo que en el trabajo final utilizaron la parábola del buen samaritano, entendiendo que se puede amar al prójimo. En tanto, Brian reconoció: “Nuestras familias se ponen muy contentas porque aprendemos a cambiar nuestros pensamientos. Con el padre Nicolás empezamos a entender la palabra de Dios”.
Luego del acto, Lorenzo bendijo la imagen de la Virgen situada en el ingreso de la Unidad, a la vez que rezó para que ella proteja a los agentes penitenciarios y a los internos. Por último instó a dejar de sentirnos superiores o inferiores para empezar a caminar juntos. “Eso es lo que hace la Iglesia en las cárceles o intentamos hacer. Poner el hombro porque la alegría compartida es más alegría y el dolor compartido es menos dolor. La Biblia nos enseña que el otro es mi hermano y que Dios es mi padre”, concluyó.
Tras la emotiva jornada, el Director de la Unidad 45 de Romero, Juan Carlos Troche, contó que siempre contaron con el acompañamiento del padre Nicolás y que el mismo fue recibido con muy buena predisposición por parte de los internos. En este sentido, afirmó: “Teniendo en cuenta que tenemos una población netamente de jóvenes, pienso que la religión tiene un impacto positivo desde temprana edad. Ahora, empezamos con 40 internos. Ojalá que para fin de año tengamos a la mitad de la población avocada a la fe”.
T: MTD
F: LO
