Comenzó el taller de braille “Corazones y Sentidos” en la Unidad 47
San Martín, 18/04/24.- En el marco de las actividades que se desarrollan en las cárceles bonaerenses, días atrás comenzó el taller de braille “Corazones y Sentidos” en el Centro Cultural “A Pulmón” que se encuentra en la Unidad 47 San Martín.
El taller se lleva a cabo los lunes y miércoles de 9 a 11.30 y es dictado por Claudia, privada de su libertad alojada en el pabellón 1 del sector B del anexo femenino, con la colaboración Ariel, del pabellón 6 del penal masculino, quien es ciego y se encuentra aprendiendo a leer, escribir y desplazarse en el contexto donde se encuentran.
El braille es un sistema de lectoescritura para ciegos que consiste en signos dibujados en relieve para poder leer con los dedos, el cual es imprescindible y más que necesario para las personas no videntes como herramienta para poder comunicarse a través del lenguaje de la escritura y lectura, en cuadernos o símbolos y la interpretación de los mismos.
El espacio de braille tiene lugar en esta unidad desde el año 2020 con el objetivo de enseñar el sistema para poder leer, transcribir y dibujar, realizar mapas, libros, juegos didácticos, recetas de cocina, entre otras producciones y poder trabajar con diferentes instituciones que soliciten donaciones.
Al respecto, Claudia relató que “aprendí el sistema braille hace muchos años cuando estaba detenida en otra unidad y empecé a perfeccionarme…luego me volvió a tocar pasar este contexto de encierro y empecé a dar el taller yo, y una tarde me dijeron mirá hay un muchacho ciego te animás a enseñarle este sistema y sin dudarlo dije que sí”.
“Y ahí empezamos – continuó- le enseñé a leer, a escribir, cómo se hacen los mapas, hicimos bastones, escribimos un libro en alemán, un manual de estudios, libros de cuentos, recetas de cocina, trabajos didácticos para personas no videntes, aprender a identificar elementos y materiales que utilizamos en nuestra vida diaria”.
En tanto, Ariel contó: “Soy no vidente desde el año 2017, tengo 50 años, y por un inconveniente en la vida quedé ciego, y hace casi tres años estoy alojado acá en esta unidad y acá es donde aprendí. Cuando vine me presentaron a Claudia que enseñaba braille, y ella me enseñó a leer y escribir”.
“Aprender el sistema braille me ayudó muchísimo. Aprendí a leer y escribir con esta tablilla, en hojas de braille, y para escribir tenemos un punzón que es sin punta. Con esta tablilla aprendí a escribir todo el abecedario y todos los números. Me sigue costando mucho aprender, pero siempre le pongo toda la voluntad y me cuesta aceptar que nunca más vos a volver a ver, pero soy consciente y sé que esta es mi nueva vida y tengo que aprender, también para cuando esté en la calle” expresó el interno.
Estas actividades que se realizan dentro de las tareas tratamentales de la Subdirección General de Educación del Servicio Penitenciario Bonaerense son acompañadas tanto por la Jefatura de Unidad presidida por el director Claudio Simonetti, como del Complejo Penitenciario San Martín representado por su jefe Fernando Laserna y el secretario de Coordinación Miguel Di Napoli.
CS/FW
