El Arte de Vivir en el Pabellón Siete

San Martín, 21/08/14 Desde el martes 19 y hasta el viernes 22 de agosto los internos del Pabellón 7 de la Unidad 48 San Martín realizarán un Curso avanzado de meditación, yoga y respiración.

Las actividades serán dictadas por Ismael Maestrini, coordinador del programa “Prisión Smart” para la Argentina y Latinoamérica de la Fundación “El Arte de Vivir”.

El curso se da desde las 10 horas del martes hasta las 20 del viernes, con actividades durante todo el día entre las 6 am hasta las 22 pm, durante su transcurso los internos permanecen en silencio, se les suministra desayuno y almuerzo, consistente en comida vegetariana, cereales y frutas, durante el día practican yoga y meditación, y al final de cada día entre las 18:30 y las 20 ingresan voluntarios de la Fundación para cantar.

En la Unidad 48 hay un Pabellón exclusivo, el siete, conformado por internos que practican desde hace años las actividades del Arte de Vivir, allí diariamente concurren voluntarios de la fundación para realizar ejercicios de respiración con los detenidos.

La Fundación viene trabajando en cárceles desde hace ocho años y con el Pabellón siete de la Unidad 48 desde hace cuatro. Paula Tul, una de las voluntarias del Arte de Vivir cuenta que el Pabellón Siete es como una isla dentro del penal, los internos llevan una vida totalmente ordenada y el nivel de violencia es cero, todos conviven en armonía con sus compañeros y con sus almas.

“Ellos mismos – cuenta- reconocen que desde que practican la respiración les aflora una naturaleza que desconocían, ya no solo piensan en ellos sino que además se preocupan por el bienestar del otro”.

Ismael Maestrini el coordinador general de las actividades de la Fundación a nivel Argentina y Latinoamérica en cárceles, a nivel provincia de Buenos Aires dice que desde hace años vienen trabajando en penales de Magdalena, de Campana, de Ituzaingó, de González Catán, de Batán, de San Martín y en Sierra Chica.  Reconoce que dentro del sistema provincial ya les ha dado cursos a más de diez mil internos y que los resultados son óptimos bajando el nivel de violencia a cero dentro de los pabellones en los que se practica la respiración.

“En cuanto a las repercusiones con quienes egresan de la cárcel tenemos diferentes casos, algunos siguen ligados a la actividad afuera, incluso muchos como instructores y el resto son becados para que puedan seguir ligados al Arte de Vivir sin tener que pagar nada, ellos e incluso sus familiares”.