Nuevo espacio para la espiritualidad en la Unidad 50
Batán, 05/03/24.- Durante el mes de febrero las mujeres privadas de libertad de la Unidad penal 50 de Batán realizaron actividades para poner en valor un sector recientemente inaugurado. El acto contó con la presencia del Obispo a cargo de la Diócesis de Mar del Plata.
Como parte de las iniciativas de mejora del establecimiento, el director de Unidad, Marcelo Colque; la subdirectora de Asistencia y Tratamiento, Cintia Mandarino y el personal de Tratamiento, alentaron a las internas allí alojadas e interesadas en participar del proyecto, a dar un nuevo uso a un espacio dentro del SUM 2 de visitas.
En esta ocasión la tarea se realizó en dos etapas, la primera de ellas con la instalación de una cruz realizada durante el año por las mujeres en el curso de lustrado; y la segunda fase con la adecuación del sector para los nuevos fines.
Respecto de la instalación del símbolo religioso, las internas que adhieren al culto católico recibieron durante el mes de diciembre la visita del Obispo a cargo, presbítero Dr. Luis Albóniga, quien celebró la misa y bendijo la nueva cruz. Estuvo acompañado en esta oportunidad por el capellán del establecimiento, padre Daniel Climente, el seminarista Leonardo Ponce y varios miembros de la pastoral carcelaria.
Albóniga instó a los presentes a agradecer a Dios por la familia, los amigos y la paz. También destacó que “aunque se esté lejos de la familia, debemos unirnos en el Señor que es el lugar del amor fraterno y familiar”.
Para dar finalización al proyecto, durante el mes de febrero fueron realizadas tareas de mejoramiento en paredes, pisos y ventanas. Gracias al trabajo en conjunto, el salón de usos múltiples ahora cuenta como espacio de recogimiento y comunión para quienes adhieren a alguna religión o simplemente desean un momento de paz y reflexión.
Ante la ejecución de esta iniciativa, el jefe del Complejo Penitenciario Este, Roberto Astete, aseguró que “es muy gratificante ver el compromiso del sector con este espacio que permite desarrollar un aspecto tan fundamental de las personas como la espiritualidad, más allá del credo que se profese. Gracias a estas acciones, las mujeres alojadas en la unidad podrán tener este espacio especialmente dedicado al ejercicio de la búsqueda de la paz para el alma”.
CGV/EC
