La Provincia incorpora más de 300 guardiacárceles

La Plata, 26/07/16 Con el propósito de dar respuesta a la demanda de recursos humanos en las cárceles bonaerenses, este viernes culminó la primera etapa de preparación de 318 guardias designados en mayo pasado para cumplir funciones en las Unidades del Complejo Penitenciario de Florencio Varela y en los penales 8 y 33 de Los Hornos.

Además están siendo capacitados 116 guardias en la Unidad 39 Ituzaingó, los que luego serán designados en las cárceles del conurbano bonaerense.

Este viernes, en el Centro de Capacitación y Reentrenamiento Permanente del Personal Penitenciario, ubicado en Olmos, tuvo lugar el acto de culminación de la etapa teórico práctica, y el Director General de Institutos de Formación y Capacitación del Servicio Penitenciario Bonaerense, Víctor Villar, en representación del Jefe del Servicio, Fernando Díaz, felicitó a los flamantes guardias por el compromiso y la responsabilidad evidenciada en el curso.

“Han mostrado profesionalismo y responsabilidad. Esperamos de ustedes dignidad, sacrificio y esfuerzo. La labor penitenciaria es compleja pero los instamos a cumplir con los requisitos que deben tener como representantes del Estado en esta noble misión de bregar por la inclusión social de las personas privadas de la libertad”, afirmó Villar, quien estuvo acompañado por el titular del Centro de Capacitación de Olmos, José Obregón.

El curso para los Guardias tuvo como ejes principales la capacitación en derechos humanos, en programas de asistencia y tratamiento para los internos, como así también para la custodia y seguridad de los mismos.

El desarrollo del curso de ingreso estuvo  a cargo de docentes, instructores, tutores, referentes institucionales y extrainstitucionales, y personal idóneo, con perfil específico en cada uno de los espacios previstos.

Cabe destacar que los contenidos del curso fueron supervisados y aprobados por el Ministerio de Justicia de la provincia de Buenos Aires, y que tendrá una duración de seis meses.

En la primera etapa, que culminó hoy, se cursaron asignaturas teóricas y contó con un espacio de inserción institucional donde se realizaron visitas a más de 20 cárceles bonaerenses con distintos regímenes. En tanto, en la segunda etapa, que durará cuatro meses,  en la que cada guardia en su destino desarrollará una Práctica profesionalizante, como primera herramienta para un óptimo desarrollo funcional, supervisados por tutores educativos.

Según se explicó, las prácticas profesionalizantes estarán dirigidas a centrar los procesos de enseñanza y aprendizaje en el trabajo, propiciando una aproximación progresiva al campo ocupacional hacia el que se orienta la formación. Es un aprendizaje que se vincula y retroalimenta en el hacer, no sólo se aprende del trabajo ni para el trabajo, sino también sobre el trabajo.

Las asignaturas fueron las siguientes Derechos Humanos, Perspectiva de Género y Diversidad, Derecho Penal y Procesal Penal, Legislación Penitenciaria y Procedimiento Administrativo, Técnicas y Herramientas de Seguridad, Elementos de Seguridad, Acciones de Asistencia y Tratamiento Penitenciario,  Defensa Personal y Educación Física.


Modernización en la currícula

Desde el Ministerio de Justicia se está avanzando en la transformación de la formación del profesional responsable de la Ejecución de la Pena, distinguiendo con mayor énfasis las acciones orientadas a la seguridad y a la asistencia y el tratamiento de las personas privadas de libertad.

Los modelos de Ejecución Penal son de naturaleza dinámica y como parte de esa realidad generan insoslayables cambios institucionales, transformaciones de las que no ha quedado exenta la formación de los recursos humanos.

En este marco y bajo la supervisión del ministro de Justicia Gustavo Ferrari, el subsecretario de Política Penitenciaria, Juan Baric y del jefe del Servicio Penitenciario Fernando Díaz, desde la Dirección General de Institutos de Formación y Capacitación del SPB, se vienen organizando diversos encuentros de trabajo para separar las áreas de tratamiento y seguridad en la formación de los oficiales penitenciarios.