Arrancó el curso de mecánica de moto avanzada en la cárcel de Olmos

Olmos, 01/03/18. La Unidad 1 Olmos es la cárcel más poblada de la provincia de Buenos Aires. Tiene seis pisos y en cada nivel hay 12 pabellones. Aloja a casi 2.600 internos y en la planta baja funcionan en un galpón de 7.100 mil metros cuadrados los talleres y los centros de formación laboral.

 

En ese sector productivo del penal comienzan las actividades laborales y de capacitación todos los días hábiles a las 8 y finalizan alrededor de las 18. Los ruidos de las distintas máquinas se mezclan y los internos trabajadores se olvidan de que están privados de su libertad. Se concentran en sus quehaceres y ya no se sienten presos.

En este contexto, 50 de los detenidos empezaron a transitar esta semana el curso de mecánica de moto avanzada. Son los mismos que aprobaron dos instancias previas: Introducción a la mecánica de motos, de 30 horas cátedra, y el de mecánica básica, de 90 horas.

El curso de mecánica de moto avanzada será de 140 horas cátedra e incluye capacitación  en manejo de scaner, inyección electrónica, preparación de motores de más de 250 centímetros cúbicos y potenciación.

Esta capacitación es producto de un acuerdo alcanzado entre el Ministerio de Justicia bonaerense, el Ministerio de Trabajo de la Nación y la Confederación General Empresaria de la República Argentina (CGERA).

El curso de mecánica de moto avanzada se dicta a dos grupos de 25 participantes tres veces a la semana durante cuatro horas en cada jornada. “Son clases teóricas y prácticas. Y debo destacar el grado de compromiso de los alumnos, de los que nos damos cuenta que quieren aprender para cambiar sus vidas una vez que vuelvan a la libertad”, sostuvo Guillermo Siro, director general de la red de centros de formación de CGERA.

Leandro tiene 40 años y es de Burzaco. Es uno de los internos que participa del curso. “Los dos primeros fueron muy instructivos. Los docentes explican muy bien y nos pasan videos que complementan las prácticas. Yo creo que me voy a dedicar a arreglar motos en un taller que tiene un amigo en mi barrio”, indicó el interno.







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