U. 23: presos editaron un libro de cuentos
El acto de entrega fue el miércoles 3 de noviembre a la tarde con la presencia de autoridades penitenciarias y dos internos.
Quince detenidos participan desde hace seis meses de un taller literario. Ahora publicaron un compendio: “Antología de Cuentos Infantiles” a través de la editorial cartonera “Cuenteros, verseros y poetas”, una cooperativa de trabajo de la que forman parte.
El jefe del Complejo Penitenciario de Florencio Varela, Víctor Cáceres, destacó que “los presos no sólo redactaron los cuentos y editaron la publicación, sino que incluso a través de la citada cooperativa fabricaron las tapas y las hojas internas de cada ejemplar”.
Este proyecto, que ahora se extenderá a otras unidades carcelarias, está basado en el pensamiento de que a partir de la lectura, los internos aprendan a trabajar por un sistema cooperativo, con un fin solidario.
La iniciativa forma parte de la Cooperativa Cartonera, que es un emprendimiento sin fines de lucro creado por el abogado y escritor Alberto Sarlo, junto a los presos del Pabellón 4 de la Unidad 23 de Florencio Varela, a través del cual se publicaron íntegramente en los talleres del penal más de 200 ejemplares de esta recopilación de cuentos infantiles, los cuales fueron entregados al comedor “Caritas Sucias” (Avenida Francia y Bahía Blanca, barrio Los Alamos), de Ezpeleta, Quilmes.
La experiencia comenzó cuando en mayo pasado Sarlo llevó a la cárcel unos 400 libros para que los internos accedan a bibliografía que sirva como disparador para contar historias propias. “Para escribir bien hay que leer mucho. Aprender de otros a través de sus vivencias”, señaló el coordinador.
Sarlo, el coordinador del taller literario, estudió en la universidad pública y desde entonces quiso devolver la educación que recibió de alguna manera. “Propuse el proyecto en el Ministerio de Justicia y Seguridad, y en cuestión de días me aprobaron la iniciativa y me pidieron que lo lleve a cabo en la Unidad 23”, relató
Cuando Sarlo se reunió con el director de la cárcel, Antonio Caczurak, y le asignaron un pabellón de máxima seguridad, el coordinador se sintió gratificado. “Es que ellos son los que más lo necesitan”, comentó Sarlo. Para participar voluntariamente no se puso ningún requisito. Sólo que tengan compromiso y respeto. Los resultados sorprendieron a los coordinadores y las autoridades.
La antología de cuentos que ya están en manos de los pequeños del comedor comunitario contiene los siguientes títulos: “El conejo y la tortuga”, de Néstor Santillán; “Coquito el monito”, de Rodrigo Acosta Páez; “Alas de libertad”, de Diego Mansilla; “Dónde está la luna”, de Carlos Miranda Mena; “La gran carrera”, de Amalio Biasoli; “La chica contorsionista”, de Daniel García Acosta; y “La palomita iluminada”, de Juan Martín González Quevedo; “Inocentes”, de Miguel Angel Catalana, “El árbol solitario”, de Luis Veragua; “Las ardillas traviesas”, de Gustavo Rodríguez; “Terry el perrito valiente”, de Cristian Scalabrino; “El delfín Juancito”, de Diego Alan Allevato; “Cuento de niño”, de Luis Mejeira; “La granja de Don Juan”, de Adrián Acuña Alderete y “Los cachorros”, de Luis Benítez; son otros de los cuentos del libro que en 53 páginas procurará atraer la atención de los chicos.
